SIN ABRIR LOS OJOS
FLOPI BORRILLI
Y CON ESO BASTA
EL BESO
sin abrir los ojos
despertar
sentir la presencia de
cuerpos pegados
reclamándose en silencio
la respiración
se diluye en el aire
de la habitación
de ventanas abiertas
una sonrisa
atada con hilos
teje la historia
su historia
aquel amor
frente al mar
salta por la ventana
galopa ilusiones
sueños
los cuerpos aún no se elevan
de telas suaves y dulces
que esconden su precoz intimidad
a lo lejos intensas
despegan su vuelo inmortal
con alas de libertad
las gaviotas
mientras
un ojo asoma
desde los rincones del mar
desde la infinitud de márgenes que
se arrebatan las olas
el aliento se arrastra
desde la ventana
y ellos no despiertan
aún no
saben
pero el amor está en el viento
en las olas que rompen estrepitosas
en la arena huidiza que se escurre
entre sus pies
y que alguna vez tocaronFLOPI BORRILLI
Y CON ESO BASTA
Me entretiene esa sonrisa
que se dibuja despacio
mientras te miro y me mirás
que se evapora suave
sólo cuando me escucha
detenida en cada palabra
que mis labios van formando
en círculos en el aire.
Mi cuerpo te busca
el tuyo responde
la magia asoma enseguida
en un espiral que da vueltas
infinitas
conquista el momento
se siente en el aire
la toco despacio
me gusta y te gusta
y con eso basta.
FLOPI BORRILLI
EL BESO
El
primer beso es todo. Es deseo y realidad;
es
la mezcla de sensaciones que hay que saber apreciar.
Pequeñas
variaciones que podemos llegar a diferenciar
poco
a poco al difrutarlas, al sentirlas con los ojos cerrados.
Las
tensiones y los miedos del momento previo suceden
mientras
esa lucha de mariposas y arañas en el estómago,
te
hacen desear ése beso como único horizonte,
como
el aire que respirás a cada momento.
Los
segundos que preceden aquel beso parecen eternos,
pero
se aceleran por la propia motivación
de
la búsqueda de esos labios que serían el edén;
un
oasis en donde al llegar querrías quedarte por siempre.
Y
el momento del contacto primario
parece
una implosión que sacude tus sentidos,
porque
si hasta ese momento tu mente caminaba en línea recta;
a
partir de allí, se dispara en distintas direcciones.
Ése
dulce choque te quita el aire y
te
hace morir para renacer a cada segundo.
Te
hace convivir y compartir con el otro
aquel
momento de sabores y sentidos profundos
La
vista cegada por tus parpados
hace
que todos tus sentidos esten mucho más vivos,
permitiendo
a su vez que tu pensamiento y tu imaginación
se
entrelacen definitivamente, creando nuevas sensaciones.
Pero
el beso no es sólo un beso.
El
beso es el contacto, son los labios y la mente
En
ése instante no hay nada; ni otros ni mundo,
porque
el beso es el mundo en sí mismo
Y
si al abrir tus ojos puedes observar la miel en sus ojos
y
ver el sol que resplandece sobre ellos;
no
deberías creer que estas dentro de un sueño,
sino
que un beso ha pasado por tus labios.
CÉSAR EDERY
TE BUSCO
Te
busco en cada rincón de mi presente.
Te
imagino en mis segundos, en mis amaneceres.
Tus
gestos dibujados en las arrugas del sofá
cambian
al ritmo de los laberintos
de
mis pensamientos.
De
la radio escapan sombras de palabras,
que
se cuelgan un instante del marco de la puerta,
para
caer al abismo de este espacio,
que,
poco a poco, se apodera
de
todo lo que me queda.
PAULA DI CROCE
SUEÑO AMOR
¿Podría enamorarme de alguien que no
conozco
y no sé si existe más allá de mis
pensamientos?
¿Podría fascinarme con unos ojos que
nunca me miraron,
de unos labios que no besé o de una
caricia que nunca fue?
¿Podría pensar que mi amor se deposita
en ésa persona
sin siquiera haberla visto sonreír
ni una sola vez?
¿Podría desear soñar con que ése
amor me envuelva,
pero con algo de temor a despertar y
que se esfume?
Continuamente describo su figura en
un cielo limpio y celeste,
dejando una huella de nubes con el
paso de mis manos.
Intento tocar el agua mansa con mis
dedos,
y en ése movimiento poder imaginar y
recrear su rostro.
Veo en cada persona que cruzo en las
calles, las plazas y los bares;
algo de aquella persona amada.
Y ése algo me hace creer, me hace
ilusionar,
me hace saber que tal vez nos
encontremos.
Me duermo y me despierto pensando en
nuestro amor.
Un amor fundado en unos ojos, unos
labios, unas palabras
que me fascinan, me seducen y me
atrapan,
pero siempre como fantasía y no como
pura realidad.
El día y la noche transcurren de
forma cíclica
y todos mis pensamientos me llevan a
esa ensoñación,
por eso creo que mi dependencia a ese amor es
total,
sin por eso llegar a ser un karma ni
un talismán.
Este amor no es ni un trofeo ni una
carga,
tan sólo es, tan sólo transcurre;
y mi vida se sostiene en aquel
pensamiento,
siendo como el aire: necesario y
habitual
Pero si no conozco a esa persona,
y nada sé de su existencia real y
física.
¿Puedo estar idealizando aquel amor?
¿Puedo estar deseando ése sentimiento?
Tal vez ese amor exista en otra
situación,
en otro mundo, en otra realidad.
Si los sueños son otra realidad, implícita
y aparente,
¿Puedo
creerme un soñador?
CÉSAR EDERY
SUSURRO
No había sol
celebrando la
media luz
que cubría su piel
sumergida en
la llanura negra
de una expiración acabada
despacio
en círculos
se pierden por ahí:
en alguna idea,
refugio de llantos
los gritos
ahogándose en
penurias escandalosas
navegando
incansables por
el paraíso
de la ofuscación
despierta/ despierta
el rumbo que
espera su caminante
hace arroyos
en el aire
susurra su llegada.
FLOPI BORRILLI
NACIDO
Reposa
donde está oscuro
donde no ve el hombre
un aleteo.
El susurro del agua
lo arrastra consigo
más allá.
Se pierde
para esconderse
en la costra
que no brilla.
Atraviesa penumbras
no-ruidos
hasta que un grito
quiebra el aire.
Su espectro deshace el silencio
y un pájaro
nace sin saberlo.
FLOPI BORRILLI
LUNA LLENA
Afuera, la tormenta parecía haber terminado.
Las tormentas suelen irrumpir, alborotar y después desaparecer para dejar las huellas de su paso.
Así sentía su corazón: alborotado. Pero sabía que esa tormenta, la interna, tardaría mucho en desaparecer. Mucho más que aquella que veía alejarse a través de la ventana.
Las cargadas nubes se iban abriendo y, detrás de ellas, podía verse un cielo estrellado.
Se acercó al ventanal, y aunque la noche era muy fría, salió a la pequeña terraza que daba al jardín.
La luna llena siempre le había causado una emoción especial. Tan cercana, tan silenciosa. Convirtiéndose en testigo y cómplice; y al mismo tiempo, exhibiendo su magnética luminosidad.
Con el corazón alborotado estaba. Esa mezcla de inquietud, ansiedad, ilusión, miedo, desconcierto; tal vez más sensaciones que no lograba distinguir. Todo junto y desordenado.
Y la gran pregunta: ¿De dónde provienen? ¿De mí?
Otra vez la luna invitando a creer en la belleza. En que de verdad hay un sentido, una razón para todo esto.
Y una vez más, la certeza. Esa que duraba solo un instante, y que aparecía en los momentos más intensos.
La certeza de que es posible despertar el paraíso dormido...
PAULA DI CROCE
Cada vez que te miraba,
sonreías con una dulzura singular.
Pero yo prefería acallar mis impulsos.
Hasta ayer, nuestras voces se entrelazaban
en una danza perfectamente coordinada;
en donde cada palabra era un mundo único.
Pero yo censuraba mis emociones.
Hasta ayer, tu piel rozaba la mía,
tu mano me envolvía y me protegía;
y todo era bello y natural.
Pero yo esquivaba con ímpetu mis deseos.
Hasta ayer, la noche y el día eran uno;
como vos y como yo, como nuestra amistad;
en donde la confianza era total.
Pero yo no dejaba nada librado al azar.
Hoy no dejo de pensar en vos,
pero es diferente a cualquier otro día,
porque el nudo en la garganta y la piedra en el estómago
Pero hoy estoy viendo el ayer,
y puedo hablar de ése pasado.
Porque al pararme aquí, puedo ver el mañana.
Y me sonríe, y yo sonrío
Y ése intento de negación y ocultamiento
Que hoy esperaba ahuyentar y espantar mis emociones;
Esta vez fallará, y lo hará para siempre,
porque hoy no es cualquier día.
Mañana haré lo que hoy evito, pero anhelo.
Mañana buscaré lo que adrede ayer olvidaba
Mañana no será como ayer ni como hoy,
Sino que será el futuro, será un mañana
Mañana enfrentaré todos mis miedos
y no bajaré en ningún momento la mirada.
Mañana juntaré valor dejando a un lado el temor,
y al tomar tu mano te diré: Te amo.
CÉSAR EDERY
EL DOLOR ES EL ADIÓS
Las lágrimas de ella
se mezclan con las de él.
Ella lo abraza bien fuerte
pensando en su frágil corazón.
El desahoga su alma,
pero se siente más sólo que nunca.
Ya nada será igual
y lo que era todo, ahora es nada.
Sus sentidos siguen ausentes,
y su mente flota sin destino.
Ella ha perdido a su amor.
El siente que perdió el amor.
Ningún beso ni palabra alguna
podrán siquiera sanar su corazón.
El dolor está en sus ojos,
y saben… el dolor es el adiós.
CÉSAR EDERY